Las personas en nuestro día a día, tenemos una serie de relaciones en las cuales se brinda información personal para ser usada y registrada, como por ejemplo los bancos al pedir un crédito, en las inmobiliarias, en los temas de los financieros, entre otros, estas relaciones son complicadas en cuanto involucran créditos, prestamos, peticiones, obligaciones en general, pues al momento de incumplir con esto, el deudor o moroso es señalado por las compañías, pasándose la información entre ellas de forma interna para hacerles del conocimiento todos los datos relacionados a la persona y su penosa situación y aun y cuando el individuo se pone al corriente con su obligación, la información compartida no se elimina.

Con el surgimiento de internet y el auge que ha tomado, en el cual, es muy fácil que alguien suba información respecto de algún hecho o acontecimiento, resulta mucho mayor el daño que se puede causar por este tipo de empresas, pues al publicar algo en internet, este se puede “viralizar” llegando a millones de usuarios de la red, y este tipo de publicaciones no solamente se dan en situaciones de adeudo o mora, sino inclusive, en algún momento embarazoso capturado en video o foto, información falsa, o secretos filtrados y subidos a la red, todo esto, puede llegar a causar afectaciones a las personas, transgrediendo su intimidad, dañando su honra, su dignidad, su imagen o su autoestima, ya que, no solo son las redes sociales o las fuentes directas de donde emana la información, sino, también son los motores de búsqueda como google, yahoo, bing, entre muchos otros, los que propician la distribución masiva de los datos, pues cualquier persona al realizar una búsqueda relacionada, puede encontrarse con ellos.

Por ello en el derecho internacional surgen instrumentos en las leyes para limitar el uso de la información de los morosos y con ello evitar su divulgación, en el tema crediticio existen normas que prevén la eliminación de información antigua, todo esto, partiendo del concepto de Habeas Data (garantía que busca evitar información falsa) en relación con la protección de datos personales, el derecho a la intimidad, al honor e imagen.

Luego entonces, el DERECHO AL OLVIDO se puede considerar como el derecho que tiene todo individuo a solicitar que se suprima cualquier tipo de información que esté relacionada de manera directa sobre su persona y le cause una afectación a sus derechos fundamentales, ya sea por información falsa, incorrecta o antigua y desactualizada, siempre que no sea de interés público o referente histórico, este no solo permite realizar la petición de eliminar la información de la fuente original, sino que además, es solicitar a los diversos motores de búsqueda que dejen de indexar la información relacionada a su nombre y apellidos, es decir, que los motores como google, dejen de relacionar el nombre con la información, para que no se muestre en las búsquedas, ningún dato relacionado a la petición realizada, es decir el desaparecer de la internet.

Este es un derecho novedoso en nuestro país y la realidad es que, no contamos con mecanismos eficaces para hacerlo valer de forma simple, por lo que un ciudadano necesitará forzosamente de un abogado para poder formular su petición y darle seguimiento, por ello, si se encuentran en una situación en la cual se vean afectados, puedes contar con la experiencia y profesionalismo de nuestra firma legal para asesorarte y representar tus derechos.

 

 

LIC. VÍCTOR ÁNGEL VIZZUETT HERNÁNDEZ.
DIRECTOR DE ÁREA OPERATIVA DE LA FIRMA LEGAL MEXICAN CONSULTING & DEVELOPMENT.